Cómo se separan los residuos orgánicos
[entradilla] Los residuos orgánicos suponen casi la mitad de la basura que generamos, en nuestras casas. Es aún mayor cuando nos sumergimos en el mundo industrial, donde las cantidades de se multiplican, tanto por la cantidad de personas que las generan, como por la propia actividad de la empresa. [/entradilla]
No es tan sencillo: Cómo separar los residuos orgánicos
Empresas como las agroalimentarias, establecimientos de hostelería, comedores escolares o mercados municipales, generan un gran flujo de residuos. Aquí la recogida y el reciclaje de los residuos orgánicos, además de evitar un impacto medioambiental en materia de emisión de gases de efecto invernadero, nos proporciona una alternativa energética y de fertilizantes. Gracias a este proceso, obtenemos biogás y compost, cerrando el ciclo de la economía circular.
Para ello es necesario separar correctamente los residuos orgánicos del resto de residuos. En ocasiones, mezclamos indebidamente restos de materia inorgánica con orgánica, generando un problema de gestión de residuos. Según el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO), el objetivo es que los elementos no correspondientes no superen el 1-2% del peso total. Cuando este porcentaje se eleva por encima del 10%, se dificulta el proceso de tratamiento de las materias.
Una vez separados los residuos orgánicos del resto de residuos, toca separar los propios residuos orgánicos, para su posterior recogida, transporte y tratamiento o eliminación. La separación se realiza según el estado en el que se encuentre la materia. Puede hacerse manualmente, en contenedores y silos, o por medio de una fosa con separador de grasas.
¿Qué es una fosa con separador de grasas?
El objetivo de una fosa es la recepción de las aguas residuales industriales. Consta de dos compartimentos: El primero, el digestor/decantador de la fosa, y segundo el separador de grasas. En el primer compartimento se decantan y digieren las materias suspendidas más pesadas, entre ellas los sólidos. En el segundo compartimento, el agua residual entra al separador donde los lodos se decantan al fondo, haciendo que las grasas suban a la superficie, y dejando el agua limpia. Las aguas limpias, después de haberse decantado y filtrado, vuelven a la red de saneamiento, por el colector municipal o a una planta de tratamiento, dependiendo las características de la empresa que vierte esa agua gris.
De esta manera conseguimos separar los residuos orgánicos en según su estado de la materia, sólidos, por un lado, pastoso, lípidos y líquidos.
En Morga industrial, instalamos y reparamos fosas con separadores de grasas, para solucionarte tus problemas de gestión de residuos.

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